El refugi de Conangles: las rutas para descubrir su entorno

El refugi de Conangles es un refugio situado en los Pirineos de la provincia de Lleida. Se trata de un lugar apacible, ubicando en el maravilloso bosque de Conangles. Además, su situación justo en la ribera del río Noguera-Ribagorçana, hará que puedas disfrutar de un buen momento de relax en su terraza.

El refugio cuenta con una buena oferta de servicios, como bar, duchas calientes y camas individuales. Además, también ofrece excursiones guiadas.

Cómo llegar: accesos al refugi de Conangles

El refugio está muy bien comunicado, pues se sitúa al borde de la carretera nacional N-230. En las inmediaciones encontrarás amplio aparcamiento para camiones y, más adelante, el parking donde podrás dejar tu vehículo en cualquier época del año.

Por otro lado, frente al primer aparcamiento encontrarás una parada de autobús, correspondiente a la línea regular Barcelona-Vielha. Este servicio une varias ciudades y poblaciones, siendo una estupenda opción logística en excursiones líneales.

Rutas de senderismo desde el refugi de Conangles

El refugio tiene una posición tremendamente estratégica. Se sitúa en la zona oriental del Vall de Barravés, en uno de los extremos meridionales de la fantástica Val d'Aran.

Pero su mayor particularidad reside en que es la puerta de entrada a tres entornos espectaculares:

• Hacia el este, encontrarás un par de senderos principales para adentrarte en el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici.
• Hacia el norte, darás con el sendero que lleva a la hermosa localidad de Vielha.
• Hacia el oeste, cambiarás de comunidad ingresando en Aragón, metiéndote de lleno en el Parque Natural de Posets-Maladeta.

Hacia el sur encontrarás el pantano de Baserca, con una pista forestal que te llevará directamente desde el refugio.

El bosque de Conangles

El refugio también te dará acceso al bosque de Conangles. Se trata de uno de los bosques de hayas y abetos más importantes de la península, especialmente vistoso con los colores del otoño. En verano, el verde exuberante también será un magnífico encuadre para tus fotos.

Así, pasear por sus senderos es una actividad relajada para disfrutar en familia. Desde el mismo refugi, podrás realizar una sencilla ruta circular para explorarlo.

El bosque se extiende a todas direcciones y, debido a ello, podrás alargar tu excursión para descubrir más a fondo el maravilloso entorno boscoso del refugio.

Excursiones recomendadas

Aunque podrás idear otras rutas sencillas por la zona, el entorno de media y alta montaña hará que a menudo te encuentres con desniveles interesantes. Así que nos centraremos en rutas de dificultad moderada, pero que te ofrecerán grandes recompensas.

• El Lac Redon y el Lac de Rius son dos lagos glaciares de gran belleza. Tendrás que hacer frente a una potente subida, con algunos tramos muy estrechos. Pero estamos seguros de que te sorprenderán.
• Más allá, el Lac de Mar es un alargado lago que también cuenta con un encanto muy particular. El refugio de la Restanca se sitúa cerca, así que puede ser un destino donde pasar otra noche montañera.

• Hacia el oeste, las marcas rojiblancas te llevarán hasta el refugio de Cap de Llauset. Las paredes verticales de sus alrededores son impresionantes, como el muro que forma la cresta de la Tuca de Vallibierna.

Ascensiones a picos cercanos

Conangles es también inicio de varias ascensiones imprescindibles, de esas que no pueden faltar en tu mapa. Algunas de ellas forman parte del reto de los Tresmiles del Pirineo y otras, además, están presentes en el listado de los 100 cims.

Te encontrarás, por tanto, con grandes picos que te ofrecerán grandes desniveles, terrenos escarpados y un buen componente aventurero. En especial, en este repaso nos acordamos de:

• El Besiberri Nord. Si bien por la arista sur la ruta es un tanto complicada y requiere de mucha experiencia en crestas, disfrutarás cada paso en esta vertiente de Conangles. Una cascada, un lago, un refugio a sus pies... ¡te irás encontrando con un buen número de sorpresas intermedias!
• El Comaloformo es un pico más accesible por esta cara. A pesar de ello, te enfrentarás a un gran pedrero y a unas cuestas muy pronunciadas, repletas de rocas. Pero la panorámica que podrás disfrutar, hará que te olvides del esfuerzo.
• El Tuc de Molières es otra de las grandes propuestas para acometer desde aquí. Su aproximación ya te enamorará, así que en los metros finales no podrás dejar de mirar en cualquier dirección. Y, una vez en cumbre, tendrás el Aneto de fondo.