Rutas al Monte Perdido
Descubriendo el Monte Perdido
La cumbre del Monte Perdido es la más alta del macizo del mismo nombre, que es también la formación calcárea de mayor altitud de Europa.
Se sitúa en el sector central de los Pirineos, en la provincia aragonesa de Huesca, formando parte del Parque Nacional de Ordesa.
El bloque montañoso está declarado por la Unesco como reserva de la biosfera y en la cara norte se encuentra un glaciar de gran pendiente y dimensión, que sin embargo va perdiendo volumen debido al cambio climático.
Rutas de ascensión
El Monte Perdido es ascendible tanto por su cara norte como por su vertiente sur. En invierno o con condiciones de hielo y nieve, debes ir con el material adecuado y contar con la experiencia necesaria, pues puede contar con algunos tramos de cierta complejidad.
Desde Góriz
Una de las vías clásicas comienza en el refugio de Góriz, al que puedes llegar atravesando la pradera desde el parador, en la carretera que lleva al refugio de Bujaruelo.
El camino más directo sube coronando en primera instancia la Punta Escaleras, pero es una vía compuesta por numerosos resaltes. En su lugar, puedes seguir hacia el paso de cadenas, para llegar al collado que comunica al norte con el Cilindro de Marboré. El último tramo lo enfocarás por la Escupidera, haciendo un pequeño bordeo por el norte de la cumbre.
Desde Pineta
Al sudeste, el refugio de Pineta es otro punto de inicio clásico. Remontando el valle hasta las inmediaciones del ibón de Marboré, encontrarás el desvío para afrontar el macizo por su lado norte. Si bien en estilo alpino puedes atajar e ir directamente a la cima, el camino te llevará a la cresta por el collado llamado Cuello del Cilindro, enlazando con la ruta sur.
Como parte de una ruta de largo recorrido
La Alta Ruta de los Perdidos propone su ascensión como aliciente extra de la travesía, por lo que puede ser una gran idea si pretendes coronarlo. Además, tendrás la oportunidad de coronar otro gran macizo al noroeste: el Vignemale.